OUR LATIN THING
Nilton Yhuri Carreazo Pariasca*
Échale semilla a la maraca pa que
suene chacuchá cuchucuchá cuchá...
Cheo Feliciano en El Ratón
La Real Academia Española (2001) define
salsa como una composición o mezcla de varias sustancias comestibles desleídas, que se
hace para aderezar o condimentar la comida... ¡Nada más cierto! Pues esto constituye la
Salsa: una mezcla y fusión de distintos géneros de la música cubana, principalmente el
Son, la Rumba, el Danzón y sus derivados; con elementos de otros géneros del Caribe,
como la Bomba, la Plena, la Cumbia; y géneros latinoamericanos como la Samba y el Tango.
Willie Colón añadiría La Salsa no es música, es un concepto musical.
Pero, ¿de donde proviene el término Salsa? Para poder explicar el origen de este
término debemos situarnos en el South Bronx de Nueva York de los 60s: el barrio, la
llamada Caldera del Diablo; donde un grupo de inmigrantes (cubanos y
puertorriqueños principalmente) mezclaban sonidos y ritmos en la búsqueda de un ritmo
que los identificara. La casa disquera Fania reúne a estos músicos e inicia de esta
manera la propagación de este género musical. Sin embargo, al igual como el Tango o el
Jazz en sus inicios; este nuevo ritmo sufrió muchas críticas, pues era música
irreverente proveniente del barrio. Se decía que era música cubana vieja y poco
innovadora, sin contenido y simplista... hasta el año 1971.
El 21 de agosto de 1971, se presentó en el salón de baile Cheetah la
agrupación Fania All Stars en un concierto-baile. La Fania tenía como director musical a
Johnny Pacheco, Ray Barreto en la tumbadora, Larry Harlow en el piano, Willie Colón en el
trombón, Bobby Valentín en el bajo y Roberto Roena en el bongó. Como invitados
especiales Richie Ray y Bobby Cruz. En las cuerdas vocales: Adalberto Santiago
y Pete El Conde Rodríguez, cantantes identificados con la tradición sonera y
charanguera de Cuba en Nueva York; Santos Colón y Cheo Feliciano, cantantes solistas que
provenían de la tradición musical caribeña en Nueva York; y los novatos Ismael Miranda
y Héctor Lavoe, soneros jóvenes que expresaban su conexión directa con el barrio, con
sus estilos de soneo malandro y callejero. El éxito fue apoteósico, la reunión se
inmortalizó en la película Nuestra cosa latina y Johnny Pacheco
oficializó el término Salsa, el cual promovió cuando la Fania empezó a
viajar por Europa: Como la palabra salsa igual que
sabor o azúcar, por ejemplo siempre ha estado ligada a
esta música, no me pareció mal llamarla así.
Hasta la década del
80 la Salsa ofrece sus mejores frutos como corriente musical. Durante este tiempo,
cada cocinero mezcló los ingredientes de manera singular para crear su
Salsa; obteniendo para beneplácito nuestro salsas con diferente
Sabor. Sin embargo, independiente del intérprete o agrupación musical, la
SALSA conserva algo en común: la calle, el barrio como mudo testigo de su
concepción.
Bibliografía
* Médico Residente de Pediatría III.
UNMSM.
Instituto de Salud del Niño
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