AMERICAN PSYCHOLOGICAL
ASSOCIATION: Research Agenda for Psychosocial and Behavioral Factors in Women's Health.-
Un folleto de 32 páginas.- Washington, 1996.
Esta publicación, concisa pero de gran
valor, esta recomendada por The Advisory Committee of the Psychosocial and Behavioral
Factors in Women's Health: creating an agenda for the 21st century
conference.
El tema es la salud de la mujer. "La atención científica y pública hacia temas
concernientes a la salud de la mujer se ha intensificado en los últimos años. Con este
nuevo énfasis se ha reconocido de modo claro que en los esfuerzos de promover la salud y
prevenir la enfermedad, las necesidades de las mujeres frecuentemente difieren de las de
los hombres". Esto ha llevado a elaborar esta agenda, dividida en tres grandes
áreas: Investigación (Research agenda), Educación y entrenamiento (Education and
Training agenda) y Política (Public Policy agenda), cada una con subáreas.
La Agenda de Investigación propone seis principios rectores: 1) el foco de la
investigación debería estar centralizado en comprender cómo las experiencias de grupos
afectan las áreas relacionadas a la salud, más que simplemente documentar diferencias de
grupos o diferencias entre hombres y mujeres; 2) los factores psicológicos,
comportamentales y sociales vinculados al género, y sus interrelaciones con factores
biomédicos, son importantes en la comprensión de la salud y de la enfermedad; 3) los
factores psicológicos y comportamentales son importantes predictores del bienestar, la
vulnerabilidad a la enfermedad y de los resultados de ella; 4) la calidad de vida es un
indicador importante e influye la sensación de bienestar, de salud funcional y de
participación en el mundo psicológico y social; 5) una perspectiva de desarrollo que
abarque toda la vida es de importancia para entender las prácticas de salud y sus
resultados; y, 6) los factores contextuales representan tópicos de corte transversal que
deben ser considerados en el diseño, la implementación, y la interpretación de los
resultados de la investigación con la finalidad de enriquecer la investigación
biomédica tradicional y ofrecer nuevos enfoques.
Así, la salud de la mujer debería ser estudiada dentro de los siguientes contextos:
relaciones - ¿cómo las relaciones de las mujeres afectan su estado de salud, sus
conductas y sus actitudes hacia la salud y cómo todas éstas influyen, a su vez, en sus
relaciones? -, etnicidad - ¿cómo la base étnica de la mujer influye en su salud, sus
conductas de salud y actitudes? -, status y poder - ¿cómo el status social y laboral y
el poder dentro de las relaciones limitan las opciones de salud o afectan el status de
salud? -, y las expectativas de género - ¿cómo es afectado el status de salud por
expectativas de género, tales como las relativas al cuidado maternal, el cuidado de otros
que están enfermos o en necesidad, expectativas para servir como soporte emocional, o las
referidas al trabajo en el hogar? -.
Seguidamente, la publicación se refiere a las conductas relacionadas con salud, tales
como, consumo de alcohol y otras drogas, tabaquismo, obesidad y dieta, actividad física y
ejercicio, enfermedades crónicas, por ejemplo, artritis y reumatismo, cáncer, trastornos
cardiovasculares, depresión, trastornos de la alimentación y SIDA y temas del ciclo
vital como envejecimiento, salud ginecológica y reproductiva, violencia masculina en
contra de la mujer y stress ocupacional.
En lo que se refiere a la agenda de Educación y entrenamiento se señala que "son
necesarios grandes cambios en el desarrollo de la educación y en el entrenamiento de los
profesionales de la salud si queremos formar científicos y especialistas con el
conocimiento, las habilidades y la sensibilidad requeridas para generar y aplicar nuevos
conocimientos acerca de las necesidades de salud de la mujer de todos los grupos étnicos
a lo largo de todo el ciclo vital y en los diversos contextos sociales y culturales".
La Asociación Americana de Psicología propone ocho principios sobre el particular: 1) la
gran importancia de entrenar a los profesionales de la salud en el reconocimiento y en la
valoración de la diversidad con el propósito de asegurar la calidad del cuidado de la
salud; 2) los profesionales de la salud deben ser educados a valorar el igualitarismo y la
colaboración con sus clientes, pacientes y con aquellos que participan en la
investigación; 3) un modelo de la conducta humana que asuma que los individuos son
activos y adaptativos (más bien que víctimas pasivas) conduce a intervenciones más
efectivas en el plano de la salud; 4) conferencias, libros de texto y otros materiales
pedagógicos deben cuestionar el pensamiento estereotipado negativo y las suposiciones
acerca de las diferencias en los marcos de la investigación y otras cuestiones,
interpretaciones de hallazgos de investigación, caracterizaciones de poblaciones y de
enfermedades, así como posibilidades terapéuticas; 5) los educadores de los
profesionales de la salud necesitan crear o adaptar mecanismos que estimulen a estudiantes
y personas en entrenamiento a colaborar, respetar y valorarse ellos mismos y sus colegas
como intolerantes ante cualquier maltrato sexual, racial o de otra naturaleza y a
interrumpir tales conductas cuando ellas ocurran; 6) los profesionales de la salud deben
ser estimulados a verse ellos mismos como una parte de un sistema social más grande que
crea, exacerba o ignora problemas de salud, así como los disminuye o los elimina; 7) debe
haber una continua evaluación y reflexión sobre valores, la ética y la práctica
profesional; y, por ultimo, 8) la salud es una función compleja de la interacción de
factores económicos, políticos, culturales, biológicos, psicológicos, fisiológicos,
espirituales y familiares.
De otro lado, entre las prioridades más importantes relacionadas a la Educación se
señalan el incluir a los profesionales de la salud de todos los campos vinculados a ella
en los esfuerzos destinados a modificar la situación actual; incorporar nuevos
conocimientos acerca de la salud femenina en los contenidos curriculares, abordando
aquellos trastornos o enfermedades que son comunes, más frecuentes o exclusivas de las
mujeres; y, diseñar un curriculum de estudio de conducta reproductiva con el propósito
de proveer a los profesionales de la salud con conocimientos y habilidades que les
permitan ayudar a las mujeres en: a) entender y disfrutar su propia sexualidad, b) regular
la concepción de modo efectivo y seguro, c) permanecer libres de enfermedades, invalidez
y muerte asociadas con la sexualidad y la reproducción y d) concebir y criar niños
saludables.
Por último, en lo que se refiere a la Agenda Política la Asociación Americana de
Psicología señala que es necesario llevar a cabo cambios significativos en la política
gubernamental en todos los niveles, así como también en las instituciones
privadas, que
permitan establecer prioridades, destinar recursos y desarrollar estructuras.
Ramón LEÓN
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