Siento que sigues aquí
y tus manos blancas acarician mis bucles,
pensando que nunca has partido
y tu voz en rima me alimenta por dentro,
porque tu partida dejó un vacío y
giran recuerdos sumergidos en vino;
más allá de preceptos:
Creer que aún te quiero
y recordar si lo hice,
quisiera pensar que todo es un sueño
que no existes, que no existo
y en un algún lugar,
una angustia muere al quemar un papel con un
cigarrillo.
|
|
|
________________________ |
|
|
1 (1974).
Bachiller en Literatura, Directora de la Revista Kreatio
Tabla
de contenido
|